ENTREVISTA | RISKCHAIN: una herramienta para planificar mejor, reducir pérdidas y fortalecer la sostenibilidad de las cadenas agrícolas
El equipo de ESA Phi-Lab Spain ha entrevistado a la responsable del proyecto RISKCHAIN: Alba Germán, científica de datos y observación de la Tierra en Earthpulse.
RISKCHAIN, uno de los proyectos del ESA Phi-Lab Spain, pretende desarrollar una herramienta para anticipar los riesgos en las cadenas de suministro agrícolas. Es una iniciativa dirigida por EarthPulse en colaboración con Eurecat y la Fundación Empresa y Clima.
Barcelona, Diciembre 2025
1. Para empezar, ¿qué es RISKCHAIN y cuál es el reto principal que busca resolver en las cadenas de suministro agrícolas y globales?
RISKCHAIN es un simulador de riesgos para cadenas de suministro agrícolas y globales.
Su objetivo principal es anticipar y gestionar vulnerabilidades derivadas del cambio climático, la inestabilidad de proveedores y las crecientes exigencias regulatorias. Muchas industrias que dependen de materias primas naturales —como alimentación, cosmética, moda o farmacia— se enfrentan a interrupciones cada vez más frecuentes.
RISKCHAIN integra datos de satélite, información socioeconómica y modelos de inteligencia artificial para ofrecer a las empresas una visión clara de dónde están expuestas y cómo pueden prepararse.
2. La agricultura y las industrias que dependen de materias primas naturales son cada vez más vulnerables al cambio climático, la inestabilidad de proveedores y las nuevas regulaciones. ¿Podríais explicar por qué es tan urgente contar con herramientas que anticipen estos riesgos?
Los impactos del cambio climático ya no son hipotéticos, y podemos verlos a través de los datos: sequías, inundaciones o cambios regulatorios están afectando de manera directa la continuidad de las operaciones del sector. Cuando una materia prima agrícola falla, el efecto se propaga rápidamente por toda la cadena global.
Aunque pueda mitigar los riesgos, sin herramientas de anticipación, la reacción siempre llega tarde y resulta más costosa. Además, las empresas afrontan un coste creciente para cumplir estándares de sostenibilidad y mantener la trazabilidad. RISKCHAIN ayudará a pasar de una gestión reactiva a una planificación proactiva, mejorando resiliencia y competitividad.

«Aunque pueda mitigar los riesgos, sin herramientas de anticipación, la reacción siempre llega tarde y resulta más costosa.» – Alba Germán, científica de datos y observación de la Tierra en Earthpulse
3. RISKCHAIN combina datos de satélite, información socioeconómica y modelos de inteligencia artificial para simular escenarios y evaluar vulnerabilidades. ¿Cómo se traduce toda esta tecnología en información práctica y fácil de usar para las empresas?
RISKCHAIN simplifica y traduce toda la complejidad tecnológica, permitiendo que el usuario interactúe con un panel intuitivo que incluye mapas dinámicos, indicadores de riesgo y simulaciones personalizadas.
Para utilizar RISKCHAIN las empresas no necesitan ser experta en inteligencia artificial ni en teledetección. Los usuarios recibirán información clara sobre qué proveedores, regiones o cultivos están más expuestos y qué variables (clima, regulación, disponibilidad de recursos) son más determinantes.
Además, la herramienta incorporara explicaciones transparentes (IA explicable) que facilitan entender por qué un riesgo es alto y cómo mitigarlo.

4. Vuestro simulador permitirá probar escenarios “what-if” y diseñar planes de contingencia. ¿Qué beneficios concretos puede aportar a sectores como la alimentación, la cosmética, la moda o la farmacia, que dependen de cadenas agrícolas globales?
Diferentes sectores tienen necesidades distintas, pero todos obtienen beneficios muy tangibles. En el ámbito de la alimentación, por ejemplo, RISKCHAIN permite anticipar el impacto de las sequías en cultivos clave y ajustar los planes de aprovisionamiento. En la cosmética y la perfumería, puede ayudar a proteger cadenas de valor sensibles como las de la lavanda, especialmente expuestas a fenómenos climáticos. En la moda y el sector textil, facilita la evaluación de riesgos asociados al algodón y otras fibras vegetales para garantizar la continuidad de la producción. Finalmente, en la industria farmacéutica contribuye a asegurar la estabilidad en el suministro de materias primas de origen vegetal empleadas en principios activos.

Supply Chain Risk SIMULATOR envision
En todos los casos, nosotros creemos que el valor añadido es la capacidad de probar escenarios antes de que ocurran y diseñar respuestas adaptadas que reduzcan pérdidas y mejoren el cumplimiento normativo.
5. El proyecto reúne a EarthPulse, Eurecat y la Fundación Empresa y Clima. ¿Cómo se complementan vuestras especialidades y qué papel juegan las empresas asociadas en el desarrollo y validación de la herramienta?
La fuerza del proyecto radica en la complementariedad y en la forma en que colaboramos.
EarthPulse aporta su experiencia en analítica satelital y en el desarrollo de soluciones de inteligencia artificial aplicadas a la gestión de riesgos ambientales. Eurecat contribuye con su liderazgo en investigación aplicada, modelización climática y metodologías avanzadas de inteligencia artificial. Por su parte, la Fundación Empresa y Clima garantiza la conexión directa con el tejido empresarial, identificando necesidades y validando casos de uso junto a compañías líderes de sectores como la alimentación, la cosmética o la moda.
Este ecosistema robusto garantiza que la herramienta se construya sobre una base científica sólida y, al mismo tiempo, responda a problemas reales de mercado.

6. Más allá de esta primera fase, ¿cómo imagináis la evolución de RISKCHAIN? ¿Podría convertirse en un estándar para que las empresas planifiquen de forma más resiliente y sostenible sus cadenas de suministro a nivel global?
Nuestro objetivo es que RISKCHAIN se convierta en una referencia práctica y confiable para aquellas compañías que quieren anticipar riesgos y planificar con mayor resiliencia y sostenibilidad. En esta primera fase, nos proponemos validar la utilidad del simulador en sectores concretos y con empresas que ya trabajan con materias primas agrícolas sensibles al clima.
De cara al futuro, la idea es de desarrollar una solución que amplíe los casos de uso, incorpore nuevas variables y facilite la integración con otras herramientas de gestión utilizadas por las empresas.